Greenlights by Matthew McConaughey
A simple vista; un vividor que engulle su vida sin reflexión, como si nada tuviera consecuencias más allá de dolores de cabeza; sin embargo, en su realidad que creía ver claramente, algo no conjugaba, carecía de alguna sombra que aquellos vagos llevan en la testa altiva y presumida que comanda sus ojeras, fiel reflejo de sus excesos, que cesan junto al alba. Matthew McConaughey ha llevado siempre un carisma muy desengañador; al ver sus películas como A Time to Kill , es fácil conmoverse por su auténtico y natural talento como actor; y cuando se le escucha, se hace lucir su transparencia que del mismo modo trasluce su entrenado coraje, dando a entender al mismo tiempo que su vida no fue fácil. Me gustó siempre ver sus entrevistas, no sólo por ser dueño de un habla carente de perífrasis aunque no es exactamente clara; en el que no deja de lucir su acento tan característico que muchos cómicos lo guardan en sus repertorios y que siempre me ha parecido, trae consigo algo del viejo oeste...